Fitoterapia. Plantas medicinales con sus nombres, descripción, familias, usos, aplicaciones, floración, etc. Remedios caseros con plantas medicinales. Documentación adicional sobre plantas medicinales. Fórmulas magistrales.

Plantas medicinales

Nombre: Oreja de oso (Ramonda myconi)
Tipo: Herbácea
Familia: Gesneriáceas

Castellano: Hierba peluda
Catalán/Català: Borratja de roca

Habitat: Pirineo catalán y aragonés
Floración: Mayo a julio
Se utiliza: Hojas y planta entera
Usos: Pectoral, Balsámico, Antitusivo

Planta

Oreja de oso (Ramonda myconi)

Denominaciones

Borratja de roca, Hierba peluda, Oreja de oso, Ramonda myconi

Descripción

La oreja de oso es una planta vivaz encuadrada dentro de la familia de las gesneriáceas. Se suele secar en la reciura del verano para volver a brotar con las lluvias otoñales. Posee un rizoma breve y una buena mata de raíces fibrosas. Las hojas son todas basales y forman una apretada roseta aplicada sobre las rocas; estas hojas son de forma aovada y se estrechan en la base para formar el rabillo. Las flores nacen sobre bohordos que salen del centro de la roseta y no suelen superar el palmo de altura. El fruto es una cápsula ovoide con numerosas y diminutas simientes.

Se cría sobre peñascos calcáreos del Pirineo catalán y aragonés.

Floración

Florece desde mayo hasta julio, ambos inclusive. De su recolección con fines medicinales interesa la planta entera, especialmente sus hojas. Estas tienen el borde grosero y son de nervadura prominente en el envés, ahondada y formando bollos en la cara superior. Se deben recoger antes de que la planta florezca, pues es en este periodo cuando más intensamente ejercen su acción. Una vez recolectadas se ponen a secar en secadero a temperaturas no muy elevadas y posteriormente se guardan en frascos herméticos. Cuando lo que recolectamos es la planta entera debemos proceder de manera similar.

Aplicaciones

La composición de la oreja de oso no se conoce por el momento. Los antiguos botánicos desconocían esta planta y no fue hasta mediados del siglo XV cuando se empezó a hablar de ella. En medicina popular se usaba para combatir todo tipo de males relacionados con el resfriado. Así, se empleaba como pectoral, balsámico y antitusivo. Incluso durante algún tiempo se empleó para combatir la tos rebelde, de ahí el nombre de yerva tussera, así llamada por los españoles de aquella época. En un tratado de por aquel entonces se decía que el agua de esta planta (extraída mediante determinados procesos que no vienen al caso mencionar) servía como remedio muy eficaz para romper los cálculos de la vejiga y de los riñones. De esta virtud no existe ningún otro documento ni mucho menos ningún estudio serio al respecto, lo que nos hace sospechar que esta acción solo existe en la imaginación de quien lo redactó. En cualquier caso es una planta de acciones suaves y casi exenta de efectos secundarios, por lo que puede ser usada sin temor, tan solo guardando las debidas precauciones.

Administración

  • Infusión. A partir de las hojas o de la planta entera se puede preparar una infusión, e incluso un cocimiento, tomando las cantidades que el médico estime oportunas. Se debe endulzar un poco ya que resulta amargo al paladar.